Quemando incienso
La verdad es que en ningún momento durante la
tortura de aquellos años pensé en la
calma que podía llegar a sentir al saberte feliz en otros brazos, lo
reconfortarte que en algún momento llegaría a ser verte pasar sin sentir dentro
una sensación de dejadez por parte tuya, hoy en día te veo pasar y sentir que
no te llevas mi alma a un lado de tu cuerpo es sensacional y muy reconfortante.
Hoy en día saludarte es no sentir mi cuerpo temblar,
es verte partir y quedarme sereno, hoy día saludarte no provoca que surja en mi aquella avalancha
de excusas para hacer que te quedes, y sin embargo significa estrecharle la
mano a alguien que debo decir, me ha enseñado lo bueno y malo que conozco del
amor, verte y solo saludarte es como pasar por aquella escuela, ver aquellos
profesores que tanto te enseñaron ,pero
con los cuales no deseas volver a convivir ni en sueños.
Hoy día verte pasar no significa colocar un
disco de baladas o tomarme un trago de ron, tampoco significa fumarme un cigarro
ni mucho menos pretender llorar, hoy día al verte solo siento la llegada de un
recuerdo, bonito o triste, pero recuerdo al fin, que llega y que se va con la
misma serenidad con que llegó,,,,,,en fin verte es como encender el incienso y
verlo quemar que solo provoca paz y un agradable momento en el que te
reconfirmas que a ver dicho adiós, no fue una opción sino la mejor de las
inversiones en mí mismo….
CARPE
DIEM
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